Los diestros David Fandila ‘El Fandi’ y Manuel Díaz ‘El Cordobés’ fueron quienes más se acercaron al triunfo en una tarde que se saldó con el balance de una única vuelta al ruedo a cargo del torero granadino. El Cordobés fue ovacionado, mientras que Cayetano fue silenciado en sus dos toros.
Ficha: Domingo, 9 de septiembre
Ganadería
Toros de Luis Algarra, bien presentados y de juego desigual.
Toreros
Manuel Díaz ‘El Cordobés’, silencio y ovación tras petición.
David Fandila ‘El Fandi’, vuelta tras petición y silencio tras aviso.
Cayetano, silencio y silencio tras aviso.
Entrada
La plaza registró menos de media entrada.
Comentario
El Cordobés se encontró con un primer toro noble, pero con poca fuerza y menos transmisión al que trató con suavidad en una faena en la que todo tuvo que ponerlo el torero. La labor estuvo limitada por un animal débil que fue a menos y al que las cuadrillas estrellaron dos veces en los burladeros partiéndose incluso un pitón. Mató de estocada y fue silenciado.
Manuel Díaz brindó al público la faena del segundo de su lote, un toro noble que embestía mejor por el lado izquierdo, por donde llegaron los muletazos más estimables del trasteo. También por la derecha logró una serie antes de llevarse el toro al sol y buscar en ese terreno la conexión con el público, aprovechando las nobles embestidas del de Algarra. Hubo hasta salto de la rana. Mató de pinchazo y estocada y el público pidió una oreja que el presidente no concedió. Fue ovacionado.
El Fandi salió a por todas en el segundo de la tarde. Lo recibió con una larga cambiada, lo toreó con garra a la verónica y lo llevó galleando al caballo. También se lució en un quite posterior y en un vibrante tercio de banderillas. Apostó fuerte al iniciar la faena de rodillas con carácter, exigiendo mucho a un toro de buena condición pero de motor limitado. El de Algarra acusó tanto esfuerzo y tuvo escasa duración. El Fandi estuvo entregado con él y mató de pinchazo, estocada y descabello. Se pidió una oreja que el presidente no concedió.
Volvió a destacar el granadino en el tercio de banderillas al quinto, sobresaliendo un par al violín. El toro se dejaba más por el derecho, metiéndose y resultando más complicado por el pitón izquierdo. El torero de Granada se esforzó por sacarle partido hasta que también se complicó por el lado derecho. Mató de dos pinchazos y más de media. Escuchó un aviso.
El tercero derribó al caballo en el primer puyazo. Cayetano hizo un quite por tafalleras y brindó al público una faena que comenzó por alto para ayudar al toro. El de Algarra tuvo nobleza como sus hermanos pero poca fuerza. Apenas duró un par de series y terminó por no pasar, por lo que Cayetano tuvo que matarlo. Silencio.
El sexto descabalgó al picador y fue aguantado en el peto con valor por el monosabio Julio Navarro en uno de los momentos más emocionantes de la corrida. Cayetano brindó a El Fandi y se dobló con el toro. Comenzó con la muleta en la zurda, pero un extraño del astado le hizo desistir. Cambió a la derecha, pero tampoco despegó la faena. Mató mal y fue silenciado tras escuchar un aviso.