La segunda clase práctica de la Feria de Murcia de nuevo gozó de un gran ambiente y otra vez fue todo un éxito artístico, viviendo una buena tarde de toros los miles de asistentes
El máximo triunfador fue el alicantino Jorge Rico, que cortó un rabo, destacando también El Lauri y Fernández de la Torre, que cortaron dos cada uno.
Ficha: Sábado, 21 de septiembre de 2013.
Ganadería
Se lidiaron astados de Román Sorando, bien presentados y de juego variado.
Toreros
Alejandro Marcos, oreja con petición de otra y dos vueltas al ruedo.
El Lauri, dos orejas.
Fernández de la Torre, dos orejas.
Rubén Martínez, oreja.
Jorge Rico, dos orejas y rabo.
Cristian López, oreja.
Festejo
Novillada sin caballos. Segunda Clase Práctica.
Comentario
Alejandro Marcos, de la Escuela de Salamanca, demostró tener el oficio bien aprendido y supo imprimirle compostura a todo lo que le hizo al primero de la tarde. Brilló en naturales largos antes de que el astado se rajara. Mató de estocada y cortó una oreja con petición de otra y dos vueltas al ruedo.
Muy bullidor se mostró El Lauri, de la Escuela de Málaga, en el recibo de capa a su primero con dos largas cambiadas de rodillas, chicuelinas y remates. El novillo en la muleta tuvo poca fuerza y se defendió pero el malagueño le buscó las vueltas con entrega sufriendo varias volteretas. Su actuación fue un dechado de raza. Mató de estocada y cortó dos orejas.
Fernández de la Torre, de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, también se empleó en el recibo de capa, dando largas cambiadas de rodillas. Con la muleta enseñó su buen corte en varias series con la derecha en las que templó muy bien al novillo. Buena impresión la dejada por este murciano, que terminó con circulares completos una labor de muy buena nota. Dos orejas.
Rubén Martínez, de la escuela de Almería, se fue a portagayola en el cuarto, un novillo noble pero limitado de fuerza al que dio muletazos estimables con la mano derecha. Terminó la faena de rodillas y no estuvo fino con la espada, pero a pesar de ello cortó una oreja.
Jorge Rico, de la Escuela de Alicante, se las vio con el novillo de más temperamento de la tarde y supo sacarle partido en una faena de entrega que tuvo mucha vibración. Demostró estar bastante puesto, salvando las dificultades de su oponente en una labor de mucho mérito que llegó mucho a los tendidos. Mató de estocada y cortó dos orejas y un rabo.
Cerró la tarde el otro alumno de la Escuela de Murcia, Cristian López, que espoleado por el triunfo anterior se fue a portagayola, demostrando sus enormes ganas. En la faena de muleta también estuvo muy entregado, logrando los mejores momentos con la mano diestra a un novillo que no resultaba fácil para un principiante. Cortó una oreja.