Los diestros Julián López ‘El Juli’ y Alejandro Talavante han cortado dos orejas cada uno y han salido a hombros en la tercera corrida de la feria de Murcia, propiciando una buena tarde en la que los aficionados han disfrutado. El Juli ha cuajado también una excelente faena a su segundo en la que perdió trofeos por la espada.

Ficha: Martes, 11 de septiembre

Ganadería

Toros de Zalduendo, manejables, destacaron segundo, tercero y quinto.

Toreros

Morante de la Puebla, palmas y bronca.
El Juli, dos orejas y vuelta al ruedo.
Alejandro Talavante, dos orejas y silencio.

Comentario 

Morante dio algunos lances buenos en el recibo al primero de la tarde. El toro manseó después de su encuentro con el caballo y demostró estar muy limitado de fuerza en los primeros compases de la faena de muleta. Morante lo intentó en dos series al natural y no se complicó más, matando con brevedad.

El de la Puebla también dejó destellos con el capote en el cuarto. Con la muleta hizo el intento sin demasiado convencimiento y estuvo un tiempo en la cara del toro sin concretar nada. Mal con la espada, fue abroncado.

El Juli se lució con el capote tanto de salida como en un quite por tafalleras posterior. En la faena de muleta comenzó sometiendo mucho al de Zalduendo en derechazos muy buenos de mano baja. Por el izquierdo el toro se lo pensaba más, por lo que después de una serie cambió a la derecha para sacar todo el partido al toro pegándose un auténtico arrimón al final que el público de Murcia supo valorar. Mató de estocada y descabello.

El madrileño se empleó con el capote en su segundo. Primero a la verónica en el recibo, después en un galleo y más tarde en un quite en el que se derrumbó el de Zalduendo. Como vio que el toro estaba justo de fuerza, el torero lo trató con suavidad y le dio tiempo desde el principio. Así logró optimizar la noble embestida del Zalduendo, lo hizo él literalmente, para torearlo muy despacio por la derecha y también al natural hasta cuajar una faena excelente. Falló con los aceros y perdió lo que pudo ser un triunfo rotundo. Dio una vuelta al ruedo.

Talavante protagonizó un buen recibo de capa en el tercero, intercalando chicuelinas y rematando con un recorte soltando una mano. La faena la inició con ayudados por alto y enseguida se echó la muleta a la izquierda para dar dos buenas tandas. Por el pitón derecho también logró buenos momentos, poniendo variedad en los remates. Terminó en terreno de cercanía dándose un arrimón. Mató de casi entera efectiva y cortó dos orejas.

El sexto fue un toro más complicado y Talavante no volvió la cara. Sacó todo el partido que pudo de un animal que embestía rebrincado y que no se entregaba. La faena no pudo alcanzar el nivel de la primera porque el toro no se prestaba. Mató de pinchazo y estocada casi entera.

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